Al hacer los diagramas de las últimas escuelas que hemos proyectado* (ver post anterior), es evidente que no se encuentran elementos comunes. Como si aspiráramos a lo específico de cada proyecto, y/o renegáramos de repetirnos. Algo de eso hay.
En el fondo, creo que es más interesante una práctica que investiga, que es crítica, que se renueva constantemente.
Si bien eso quizás sea cierto, siempre me surge la duda:
En este caso, proyectando escuelas públicas, corresponde este tipo de práctica proyectual que pretende ser experimental?
O más bien deberíamos ir por la segura, por una práctica más repetitiva, que va mejorando cada paso, y genera una arquitectura de calidad?
(Por supuesto estoy polarizando las cosas, no creo que estemos en ningún extremo)
* con Rodrigo Mediza, mi compañero de equipo, y la ayuda de Carlos Sityá, coordinador de Proyectos.
En el fondo, creo que es más interesante una práctica que investiga, que es crítica, que se renueva constantemente.
Si bien eso quizás sea cierto, siempre me surge la duda:
En este caso, proyectando escuelas públicas, corresponde este tipo de práctica proyectual que pretende ser experimental?
O más bien deberíamos ir por la segura, por una práctica más repetitiva, que va mejorando cada paso, y genera una arquitectura de calidad?
(Por supuesto estoy polarizando las cosas, no creo que estemos en ningún extremo)
* con Rodrigo Mediza, mi compañero de equipo, y la ayuda de Carlos Sityá, coordinador de Proyectos.